domingo, 7 de noviembre de 2010

CUANDO LA TARDE SE HACE NOCHE....

Caminamos por el sendero que lleva hacia el mar tu mano en mi mano, pensativos absortos en lo que seremos y hasta donde queremos llegar a ser...
En un movimiento suave y tierno ,tu posas tu brazo sobre mi hombro yo recuesto la noche de mi pelo junto a ti con sentimientos de felicidad.
El trayecto que no es muy largo se acorta ante nuestros pasos dejando junto a los dos la orilla misma del mar.
Allí nuestros pies ya descalzos se hunden lentamente en la humedad fresca y tentadora de las blancas arenas.
Las olas golpean con su salado chasquido nuestros rostros, como diciendo-tienen permiso para un beso.
Te miro y tu a mi, es ahí cuando todo comienza para seguir su curso de eterno y firme amor.
Nuestros labios se unen en dule sabor húmedo y tentador haciendo que broten en ambos los mas puros anhelos de ser uno los dos.
Allá arriba,el sol se despide lentamente guiñando cómplice un ojo a la luna que risueña, hace un puente hacia la oscuridad de la noche.
Es entonces cuando los dos cuerpos temblando en espera del momento deseado, en un arrabato de pasión sin saber que sucede, llegamos a perder casi el sentido del momento.
Sellando por siempre eterno y firme amor que se acrecienta al andar del tiempo.
Es cuando la tarde se hace noche y dos figuras se unen en las sombras sobre las frescas arenas ,junto a las aguas con aroma de sal.Allí dos cuerpos en la locura bella y sutíl danza del amor en llamas de fulgor y sueños dos bohhemios juran unirse por siempre...

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